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GUSTAVO CORDERA

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“En el arte tenemos la posibilidad de morir y volver a nacer cuantas veces sea necesario”

Fue el líder de una de las bandas más populares del rock argentino, Bersuit Vergarabat. Hoy recorre el mundo con una Caravana Mágica que le ayudó a superar el duelo de la separación.

Parece que el destino de casi todas las bandas de rock argentinas que se convierten en legendarias es el divorcio. Como las propias parejas, algunas lo tramitan en paz y hacen una consensuada separación de bienes, y otras lo viven con dramatismo y les cuesta años reponerse del golpe de saber que el amor puede no ser eterno. La separación de Bersuit Vergarabat transitó más por el segundo que por el primer camino pero hoy, seis años después, cada cual vive su feliz realidad. Y Gustavo Cordera, ex líder y vocalista de la banda del sur del conurbano bonaerense, ha decidido compartir su presente musical, que lo encuentra rodeado de una Caravana Mágica, tal como llama a la formación que ahora lo acompaña, con el público europeo.

El viernes 8 de julio el artista de Lanús tocará en la Sala Arena de Madrid y al día siguiente en la Barts de Barcelona. Aunque ya tiene casi listo un nuevo disco, a España llega con un repaso de los temas que se convirtieron en himnos para los miles de seguidores que la Bersuit cosechó en Argentina, sobre todo durante la infame década del 90, y en Latinoamérica (La soledad, Un pacto o La del toro). Tampoco faltarán canciones con las que ha vuelto a conquistar al público en su nueva etapa con La Caravana Mágica (La bomba loca, Soy mi soberano o Agua de río).

Ya sin los característicos piyamas que la Bersuit lucía para primero pequeños y más tarde multitudinarios conciertos, Cordera le sigue cantando tanto al amor como a los conflictos sociales, con letras envueltas en ritmos que van desde el rock a los más diversos géneros latinoamericanos: cumbia colombiana, la cumbia villera, la cumbia electrónica, el merengue, la bachata, el folklore argentino o la murga uruguaya. Antes de subirse al avión para emprender la gira por España, el artista se tomó un rato para contestar a las preguntas de Argentinos.es vía correo electrónico.

-De “caravanear” por los barrios porteños a estos más lejanos de Madrid y Barcelona… ¿Se sienten más ajenos o al final la esencia de los barrios es la misma en cualquier rincón del mundo?

-Tal vez la escena sea distinta pero esencialmente el ser humano está en un mismo planeta experimentándose, conociéndose, queriendo saber hasta dónde es capaz de llegar. Y también recordándose. Y ahí está La Caravana, como un puente artístico para llegar al centro de las emociones tan escondidas y perseguidas desde hace mucho tiempo. En algún lado leí una síntesis de una mujer que decía: no hay nada nuevo bajo el sol salvo lo que olvidamos. Ahí está el arte ocupando ese lugar en cada barrio del mundo.

-¿Cómo describirías tu Caravana Mágica? (además de mágica, claro)

-La Caravana Mágica es un grupo formado por gente de Buenos Aires y Uruguay que lleva la hermosa misión de hacer arte. Tuvo, como todo proyecto en formación, mucho tiempo de experiencia en distintos escenarios de Argentina y Latinoamérica para llegar a ser un grupo con un poder suficiente como para representar las canciones con total vitalidad y credibilidad. Nuestra misión es transmitir ideas, emociones, una sincera forma de ver las cosas desde una mirada artística. Creemos en el arte como la más autentica fuerza revolucionaria y sanadora.

-¿Quiénes son “los dementes” que te acompañan?

-Los dementes están representados por todos aquellos que se sienten fuera de lo normal. Los que se cuestionan, los que dudan, los locos, los indecentes, los inmorales, los que experimentan día a día su propia oscuridad y quieren darse luz,  los que pujan por nacer, los que buscan alimentarse de otra forma, los que creen en una nueva medicina olvidada, los que saben que la fuerza revolucionaria ya no está en la política mundial sino en uno mismo, los partidos, los perdidos, los olvidados.

-¿Y qué resulta de la fusión de tu historia con la banda que te acompaña en estos últimos años?

-Los dos universos se encontraron después de muchos años de separación dolorosa. Me costó mucho elaborar el duelo y hoy puedo decir que soy los dos universos. Bersuit y La Caravana, un solo corazón.

-‘Cordera Vivo’ se llama el último álbum editado, ¿es que alguna vez estuvo muerto?

-Sí, claro que estuve muerto. En el arte tenemos la posibilidad de morir y volver a nacer cuantas veces sea necesario. Personalmente creo que no puede haber un arte genuino si no nos damos la posibilidad de morir para volver a nacer. Fracasar es el gran miedo de todos los que afrontamos un proyecto, pero ahí está la esencia misma del arte, en el encuentro cara a cara con el fantasma del fracaso.

-¿Cómo es el Gustavo Cordera post Bersuit? ¿Ha cambiado algo? Si es que sí, ¿qué ha cambiado?

-Creo que el alma es inmutable, pero lo que sí cambia con el tiempo es la mirada, la cosmovisión. Ese es el nutriente que hace evolucionar a las personas y encontrarse con el alma. En ese sentido puedo decir que soy en cada momento otro. Esta es la primera vez en mi vida que tengo 54 años, nunca antes me había pasado esto, no hay nada más nuevo que esto para mí. Y con esos ojos enfrento cada nueva experiencia que me toque vivir.

-Dijiste en otra entrevista: “Vuelvo a cantar las canciones que nacieron en el barro de mi alma y florecieron en los corazones de todos”. ¿Cómo se consigue sembrar el corazón de tanta gente que tararea tus canciones?

-No lo sé, tal vez sea una pulsión sincera del mismo centro de mi corazón. La fe en lo que siento y pienso, el saber que formo parte de algo mucho más grande… No lo sé, pero ocurre. Y eso para mí es un milagro que quiero honrar.

-¿Qué cuenta hoy el barro de esa alma? ¿Lo descubriremos en el nuevo disco?

-El nuevo disco es el barro mismo de todas mis experiencias de los últimos años. Es un disco lleno de luz, de oscuridad. Es lo más intenso y visceral que hice en años. Es la síntesis más precisa de este y aquel Cordera. Y eso se construyó con la producción musical de Eduardo Cabra, de Calle 13, que le dio al disco una potente musicalidad latinoamericana.

-¿Qué se lleva un artista en la valija de las emociones de una gira por el extranjero?

-Nos llevamos vida, con todo lo que eso significa. Viajar debe ser la experiencia más reconfortante para el alma.

-El sonido rockero de tu música dialoga con otros géneros latinoamericanos. ¿Hay alguno con el que nunca hablarías?

-No , no tengo prejuicios con ningún género musical . Cada género habla de una forma de ser, de sentir, de representarlo en cada lugar del mundo. Tal vez haya gente que todavía crea en la separación, en la supremacía de un género sobre otro, pero después de tanto viajar me di cuenta que la música es hermosa en todo el mundo. Sólo veo diferencia entre los que la hacen con el alma y los que la hacen sin el alma.

GUSTAVO CORDERA Y LA CARAVANA MÁGICA

  • 8 de julio a las 21 horas en la Sala Arena de Madrid

Entradas www.ticketea.com

  • 9 de julio a las 21 horas, en la Sala Barts de Barcelona, dentro del Grec Festival

Entradas www.proticketing.com

Betiana Baglietto

Periodista, escribidora. Con un pie en cada orilla. Más de 10 años en España, y aún no pierdo el acento. Loca por Bruno y Mateo

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